Navega en un barco aparejado a la antigua

Los llaguts (láuds, llaüt), Far de Formentera (Mallorca, 1922) y Far de Cabrera (Ciutadella, 1911), de 11 y 8,50 metros respectivamente, son dos de las embarcaciones de las que cuenta el Consorci El Far para llevar a cabo su misión educativa. Ambas embarcaciones fueron cedidas por el Grupo de Puertos de las Baleares en 1991 a la Asociación Barcelona fes-te a la mar, entidad de la que nació el Consorci El Far. Desde entonces, estos barcos (remotorizados el primero de ellos con un el motor marino Solé Diesel Mini-44, y el segundo con motor marino con base Deutz SDZ-165) constituyen un excelente recurso para vivir la experiencia de navegar a bordo de un barco de madera aparejado a la antigua: largar y cazar amarras, gobernar el timón o calcular la velocidad con la corredera como se hacía tradicionalmente. Estas singladuras complementan las doce actividades educativas que ofrece el Área de Programas Educativos y que están agrupadas alrededor de tres ejes temáticos: la actividad comercial marítima, el medio natural y la navegación tradicional.

Embarcarse en alguno de los dos laudes baleares, o en alguna de las dos embarcaciones que se incorporaron posteriormente al Consorci el Far –la goleta Far Barcelona (Hardanger, 1874) y el yate de madera aparejado como queche Far Barceloneta (Barcelona, 1914)– permite disfrutar de una experiencia que aporta otros valores además de los conocimientos que se puedan adquirir en el programa de contenidos de la actividad educativa. De hecho, vivir el slow sailing, proporciona la experiencia de vivir el tiempo de manera diferente, sin prisa, sin interferencias, orienta irremediablemente a vivir el momento presente, y evidencia la necesidad de trabajar en equipo.

Actualmente la actividad cotidiana de los barcos del Consorci, está dedicada a las actividades de Área de Programas Educativos que se dirige a alumnos de todos los niveles del sistema educativo, desde educación primaria hasta la enseñanza post-obligatoria. Pero la goleta Far Barcelona hace salidas los sábados por el litoral barcelonés. Otra oportunidad de visitar o navegar a bordo de estos barcos es acercarse a los muelles del puerto durante la fiesta oficial de la ciudad de Barcelona, la Mercé.