El puerto de Blanes (Girona) cuenta con una nueva cubierta en la lonja de pescado, que da más funcionalidad a la estructura, potencia su impermeabilidad y mejora las condiciones de trabajo de pescadores y compradores. Por otro lado, la urbanización de la zona de ribera ha permitido crear nuevos espacios de uso ciudadano con arbolado y ajardinados y nuevos accesos para usuarios y peatones, haciendo más permeable el puerto y la ciudad.
Dos actuaciones que modernizan las instalaciones portuarias, potencian la conexión y la movilidad entre el puerto y el tejido urbano, y ayudan a mermar la huella de CO2 en la atmósfera, gracias a las placas solares colocadas por la Cofradía de pescadores en el techo de la lonja. Las obras llevadas a cabo por la empresa pública Ports de la Generalitat ha supuesto una inversión de 1,6 millones de euros.