El viernes empezó en Malta la 38ª edición de la Rolex Middle Sea Race con una flota formada por 104 barcos de 30 nacionalidades. Más de un millar de tripulantes de prácticamente todo el mundo participan en esta clásica oceánica del Mediterráneo, cuyo recorrido de 606 millas náuticas comienza y finaliza en Malta tras circunnavegar Sicilia en sentido opuesto al de las agujas del reloj. La previsión meteorológica indica condiciones favorables para mejorar el actual récord de 47 horas y 55 minutos establecido en 2007 por el armador estadounidense George David, que regresa a bordo de su 88 pies Rambler, el barco más rápido de las dos últimas ediciones.
Desde Sudáfrica hasta Estados Unidos; desde Chile hasta Nueva Zelanda; y, por supuesto, España. El carácter internacional de la Rolex Middle Sea Race es incuestionablemente, y en su 38ª edición lo reafirma con 104 barcos de 30 nacionalidades en la línea de salida. “Es una flota diversa en términos de nacionalidades y tipo de embarcaciones”, explica Godwin Zammit, comodoro del Royal Malta Yacht Club. “Muchas tripulaciones repiten, lo que es una buena indicación de que adoran la regata. La Rolex Middle Sea Race es siempre interesante. Su recorrido circular asegura un desafío continuo para los equipos y la meteorología en el Mediterráneo es siempre cambiante, especialmente en esta época del año”.
Como es tradición, la salida se realizó a los pies de los bastiones de Grand Harbour, en La Valeta. Los cañones de Saluting Battery resonaron con fuerza para indicar cada una de las salidas en las que se distribuyó a la flota, que tras abandonar el abrigo del puerto con una brisa de diez nudos del sureste ponía rumbo norte hacia Sicilia para negociar el primer tramo del siempre complicado y a menudo radical recorrido alrededor de Sicilia. Junto a la Rolex Fastnet Race en Reino Unido y la Rolex Sydney Hobart en Australia, la Rolex Middle Sea Race es un pilar de la relación de Rolex con el mundo de la navegación oceánica.
El recorrido de la Rolex Middle Sea Race cuenta con diferentes puntos de inflexión, cada cuál con unas condiciones meteorológicas particulares que favorecen a diferentes tipos de barcos. La previsión de un Mistral de considerable intensidad en la mañana del lunes favorecerá a priori a los barcos de mayor eslora a medida que atraviesan la costa noroeste de Sicilia antes de rodear Lampedusa y poner proa a Malta. Los expertos no descartan el establecimiento de un nuevo récord, que podría lograrse en función de cómo pasen en las próximas horas el estrecho de Messina y rodeen uno de los iconos de la prueba, la isla volcánica de Estrómboli.