Un total de doce equipos participaron en este tradicional encuentro de captura y suelta de atún rojo, que un año más se desarrolló en el incomparable marco del Port de Llançà. El evento arrancó el sábado por la mañana, a las 8:00 h con el desayuno de equipos, en un ambiente festivo y de amistad entre grandes pescadores. Como viene siendo habitual, se recordaron las normas de la prueba, y se entregó el material de marcado, así como el picnic ofrecido por el CN Llançà en colaboración con embutidos Noel.
El día amaneció algo ventoso, y la salida se retrasó hasta las 11 h, momento en el que el conjunto de los equipos se dirigió a la zona de pesca. Viendo las malas previsiones para el domingo, se decidió poner las dos marcas electrónicas el sábado, ante el riesgo de no poder salir al día siguiente. Al poco de llegar, y tras un breve brumeo, empezaron a producirse las picadas, mientras el viento aflojaba hasta quedar en una calma total. La primera jornada se saldó con dieciséis atunes marcados, dos de ellos con marcas electrónicas. A diferencia de otros años, las tintoreras fueron escasas, concentrándose toda la actividad en los atunes rojos, de dimensiones que oscilaban entre los 160 y los 130 cm.
Durante la noche se llevó a cabo la tradicional cena en el restaurante Port Llançà, donde se entregaron los obsequios ofrecidos por los patrocinadores. Los patrones recibieron unas gafas Flying Fisherman, gentileza de AZTrading, unos pantalones de pesca Colmic entregados por White Shark, y material de pesca diverso proporcionado por la tienda de pesca online JJ Pescasport. Para amenizar la cena, se proyectaron vídeos grabados durante la jornada, con espectaculares imágenes submarinas. Posteriormente, viendo la gran variabilidad de las previsiones meteorológicas, se decidió mantener la segunda jornada, a la espera de ver cómo se levantaba el día.
Contradiciendo las previsiones que pronosticaban vientos de hasta 25 nudos, el domingo se levantó con unas buenas condiciones de pesca, y tras el desayuno los participantes se encaminaron de nuevo hacia los pesquiles. De nuevo, la actividad empezó al poco de llegar, manteniéndose a lo largo de la jornada, hasta alcanzar un total de 30 atunes y 2 tintoreras. La pieza más grande le correspondió al “Estel”, con un magnífico atún de 193 cm, seguido por el “Estram”. A las 17:00 h, se levantaron cañas y se dio por finalizada la prueba.
El conjunto de la manga de Llançà se saldó con un total de 46 atunes y 3 tintoreras, lo que supuso un muy elevado nivel de actividad, en línea con lo que se esperaba de un emplazamiento como éste, colmando las expectativas de los pescadores. El vencedor fue el equipo del “Calabuig”, con un total de nueve piezas marcadas, seguido del “Blau Marlin” y el “Gala”.
Una vez más, la acogida por parte de todo el equipo de profesionales del CN de Llancà, con su presidente a la cabeza, fue inmejorable, facilitando toda la ayuda necesaria a los participantes.
Con esta prueba, finalizó la Great Tuna Race 2014 con un saldo final muy positivo, habiéndose marcado un total de 57 atunes y 3 tintoreras, contando con 21 equipos participantes. De las cuatro marcas electrónicas colocadas, tres de ellas siguen viajando con los atunes, destacando los más de 3 meses que ya acumula la pieza marcada por el “Yaya María” en Garraf. Cuando todas ellas se suelten, se analizará la información y se conocerá el ganador absoluto de la Great Tuna Race (aquel cuyo atún haya viajado más millas con la marca).
Cerrada esta edición, la organización de la ACPR se pone en marcha para preparar la Great Tuna Race 2015, con el objetivo puesto en mejorar los resultados de esta primera edición, y seguir ofreciendo a la comunidad de pescadores responsables la posibilidad de participar en la mayor competición científica del Mediterráneo.
Los organizadores del Great Tuna Race agradecen el apoyo brindado a los clubes náuticos de Garraf y Llançà, al equipo de biólogos de WWF y a la Dirección General de Pesca y, a los patrocinadores, la confianza depositada.