A últimos del año pasado el portavoz del Gobierno nipón, Yoshihide Suga, anunció la retirada de Japón de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), según informó la cadena de televisión NHK.
Suga también señaló que Japón reanudará la caza comercial de ballenas en julio de 2019. A principios de este año, Tokio trató de levantar la prohibición comercial a nivel global, pero fracasó dado que la propuesta nipona no salió adelante.
«A partir de julio de 2019, después de que la retirada entre en vigor el 30 de junio, Japón reanudará la caza comercial de ballenas dentro del mar territorial de Japón», dijo Suga en un comunicado recogido por la agencia de noticias Reuters.
«La caza de ballenas se llevará a cabo de conformidad con el derecho internacional, y dentro de los límites de captura calculados de acuerdo con el método adoptado por la CBI para evitar un impacto negativo», añadió.
La organización Greenpeace ha condenado la decisión de Japón y ha asegurado que no está «en tono con la comunidad internacional». «El Gobierno de Japón debe actuar urgentemente para conservar los ecosistemas marinos en lugar de reanudar la caza comercial de ballenas», ha asegurado el director ejecutivo de Greenpeace Japón, Sam Annesley, en un comunicado.
Japón cesó la caza comercial de ballenas en 1982 de acuerdo con una moratoria aprobada por la Comisión. Sin embargo, la caza de estos animales ha seguido produciéndose desde 1987 con fines supuestamente científicos.