El fabricante británico de yates de lujo Sunseeker International y Rolls-Royce han firmado un acuerdo de colaboración para la creación en 2020 de un yate equipado con el sistema de propulsión híbrida del fabricante de motores diesel MTU, perteneciente al grupo Rolls-Royce Power Systems. En Boot Düsseldorf, Sunseeker y MTU presentarán el nuevo sistema de propulsión híbrida.
Sean Robertson, Director de ventas de Sunseeker International, comentó: «Sunseeker siempre ha liderado la industria al innovar y ser el primero en el mercado, por lo que es completamente apropiado que seamos el primer fabricante de yates de lujo en asociarnos con MTU Hybrid Power, que revolucionará la forma en que todos los clientes motorizarán sus barcos en los próximos años».
Knut Müller, Director de Negocios Marítimos y Gubernamentales de MTU, dijo: “La combinación de motores diesel y motores eléctricos, además de las baterías y sus áreas variables de aplicación, ofrece a los armadores beneficios significativos. Un crucero silencioso, combinado con bajos niveles de vibración y emisión, ofrece enormes beneficios en términos de confort a bordo. Los altos niveles de rendimiento, la eficiencia, la compatibilidad con el medio ambiente y la flexibilidad del sistema de propulsión son de gran interés hoy en día cuando se construye un yate. Creemos que el enfoque en la futura industria náutica se centrará cada vez más en soluciones de sistemas inteligentes e innovadores en lugar de centrarse únicamente en el nivel de potencia».
El nuevo Sunseeker tendrá un sistema de propulsión híbrido MTU integrado. Consistirá en dos motores diésel MTU Serie 2000 de 12 cilindros (cada uno con una potencia de alrededor de 1.432 kW/1.947 hp), generadores a bordo, módulos de propulsión eléctrica, sistema de transmisión, baterías, sistemas de control y monitoreo, y se puede ampliar de forma modular.
El yate contará con seis fáciles modos de operación diferentes, incluidos los modos “smart hybrid” y “charge hybrid” automatizados, que permiten el uso de todas las fuentes de energía según sea necesario. En un «modo eléctrico», la propulsión del yate y la potencia a bordo pueden ser suministradas continuamente por los generadores, lo que proporciona una optimización del consumo de combustible y la comodidad a bordo para travesías largas y nocturnas. En el «modo silencioso», que utiliza la energía únicamente de las baterías, están disponibles hasta 40 minutos de propulsión y 120 minutos de energía a bordo con cada par de baterías MTU instaladas, sin que se produzcan emisiones.