A las 12:20 de ayer, la flota de mini’s de la 16ª edición de la Transgascogne se lanzó en bahía de Les Sables d’Olonne el comienzo de la regata para las dos primeras etapas de la carrera. La primera manga fue reducida de 345 a 245 millas y la Dirección de Carrera ha decidido eliminar la vuelta de la isla Belle-Ile debido al clima flojo anunciado en el Golfo de Vizcaya, a principios de esta semana.
«Nos decidimos por un cambio de rumbo, no a causa del mal tiempo, pero si debido a la falta de viento. Tomamos la decisión que parecía más razonable para tener todos los competidores listos y descansados para la segunda etapa, cuya salida está prevista el 5 de agosto», dijo Denis Hughes, el director de la carrera, que de este modo se redujo por completo la vuelta de la isla de Belle-Ile. «Hemos estudiado la idea de enviar los barcos alrededor de la isla de Yeu, pero solo ganábamos cuatro horas, que no era muy interesante. Así que optamos por la ruta directa «, dijo Denis. Sin embargo, la ruta directa no significa que será el camino más fácil debido a que una gran dorsal anticiclónica se extiende en el Golfo de Vizcaya y ligeramente ascendente.
A los navegantes les quedan por delante dos días de navegación sin parar hasta la llegada al puerto de Avilés cruzando el Golfo de Vizacaya. La dureza de la prueba radica en que cada barco lleva solamente un tripulante y no pueden utilizar ayuda externa durante el recorrido. Aunque aún es temprano para hacer cálculos con precisión, se estima que la primera embarcación llegue a Avilés sobre las 6:00 h del martes 1 de agosto. Según el meteorólogo de la prueba, la previsión durante el comienzo de la misma es de vientos flojos del suroeste, de hasta 10 nudos, y con olas de hasta 2 metros del este.
